miércoles, 15 de mayo de 2013

Laberintos educativos.

Soy profesor y estoy cansado de que los políticos y la sociedad echen la culpa del fracaso escolar a un sistema determinado de estudios, me explico, el problema no radica en el sistema organizativo, llamase E.G.B., E.S.O. etc... es la concepción de los gobiernos y la sociedad de un centro educativo. Se entienden como centros donde niños y adolescentes pasan la etapa educativa y no molesten en la calle o en casa.

Por otro lado nadie señala el problema de los curriculums educativos, eternos, imposibles de dar en el año académico, pero eso a nadie le importa, tal vez menos cosas y mejor aprendidas nos convendría más.

Pero lo mejor son los criterios de selección del profesorado: en lo público exámenes académicos y de programación, ojo ni les preguntan qué es la educación, en lo concertado o privado a saber cual es el criterio.


Sin embargo, al final, tenemos en nuestros centros de investigación, a eminencias reconocidas mundialmente en sus campos, después de haber sufrido toda una tortura educativa logran ser los mejores, ¿por qué no les preguntamos a ellos?.

Mientras, podemos seguir engañándonos y mintiéndonos con laberintos de sistemas educativos, sin preguntarnos qué es la educación.


Por cierto si los ejemplos educativos son: Finlandia y Korea ¿por qué tienen tan pocos premios Nobeles en sus filas? ¿o grandes eruditos por materias o grandes inventores? que su media de notas sea alta, indica tal vez mediocridad también alta.

jueves, 25 de abril de 2013

La marca España




Me gustaría tener la oportunidad de responder a aquellos que dicen que manifestarse hace daño a la marca España: los que realmente hace daño a la marca España son aquellos que visten a la selección española con marcas extranjeras o importan material de otros países para nuestro ejército.


Sí, los mismos que dicen que España es una potencia mundial en moda, hostelería, turismo, o técnicos y luego van y visten con trajes franceses, conducen un coche alemán y se van a restaurantes de moda indonesios, esos que se van de vacaciones a paraísos tropicales y contratan para sus empresas directivos o gurus americanos o ingleses. 


Sí señores, me voy a creer que nosotros hacemos más daño un día con una manifestación defendiendo lo que creemos que es justo, que ustedes despreciando sistemáticamente a las marcas españolas. El problema es que ustedes ya no tienen crédito.

domingo, 10 de marzo de 2013

A.A. Apocalípsis Autonómico

Durante esta crisis se ha hablado mucho acerca del estado autonómico, pero creo que los hechos hablan por sí mismos. Durante casi 40 años, hemos sido testigos de la "descentralización" del estado, para observar una neocentralización en las capitales de la Comunidades Autónomas. A veces en defensa de la comunidades se decía, que Madrid qué va a saber sobre un problema de El Barraco (un pueblo de Ávila), en la práctica, con nuestro vanagloriado sistema, a Valladolid (la capital autonómica de Castilla-León) no le importa un bledo su problema.

Aunque mi argumento más fuerte contra las Comunidades, a parte del despilfarro que generan, que en esta crisis es un dato demostrado, es que las gobiernan caciques y oligarquías de castas poderosas, arraigadas durante siglos, en donde el estado de las autonomías les ha dado la oportunidad de volver a su dorada edad media, con un estado feudal, en donde cada familia poderosa gobierna o mejor tiraniza al pueblo, auspiciada por una ley electoral injusta. La corrupción en estos estados feudales es máxima, desde obras innecesarias adjudicadas a dedo, pasando por funcionarios también elegidos al estilo digital.
Tal vez la concepción de las autonomías no es mala, lo que es malo es que las gobiernen personas cuyas familias llevan siglos viviendo allí, porque beneficiarán a los suyos, y perjudicarán al pueblo. Un sistema vampírico, donde al pueblo se le trata como a ganado, cuyos ciudadanos viven hipnotizados por los medios de comunicación afines a los señores vampiros.

Solución: la de la Roma Republicana e Imperial, que los gobernadores o presidentes de la Comunidades Autónomas sean originarios de una comunidad distinta, a la que aspiran a gobernar. Utilicemos para variar, el sentido común de nuestra rica historia.